Sobre mí

Mis primeros recuerdos son de mi mano sujetando un lapicero mientras dibujaba. Y poco después, de las sesiones continuas y las matinales en los cines de barrio. La fantasía de la pantalla solo se podía igualar a la del papel y el lápiz haciendo aparecer imágenes. 

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Así que cuando me llegó el momento elegí Bellas Artes. Y como aún no me podía quedar con un medio o el otro, decidí hacer la especialidad de Audiovisuales. 

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Durante la infancia me había convertido también en un ávido lector y las historias de Enid Blyton ambientadas en las verdes praderas británicas apelaban especialmente a mi imaginación infantil. De ahí a estudiar inglés solo había un paso. 

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Así que en cuanto acabé la carrera me fui a Inglaterra, a Londres, a probar suerte. Allí me pagué los estudios de Ilustración y Realización de Cine dando clases de español en el Sistema de Educación para Adultos del Ayuntamiento de Londres y en la Facultad de Periodismo. También empecé a escribir. Y sin darme cuenta, habían pasado nueve años. Pensé que quizá ya era momento de volver. 

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Ah, pero antes del regreso llevé a cabo mi primer proyecto ambicioso. Un corto de ficción ambientado durante la segunda guerra mundial y que usaba de base un poema muy cinematográfico escrito por una componente de un grupo artístico con el que estuve colaborando. El corto se tituló como el poema: Wrap me in film, y con él conseguí la única subvención que me han dado en la vida. Gracias al Arts Council of England y The National Lotery Fundings. Y eso que tenía cero experiencia, aunque me sirvió para montar mi primera productora indie, Madrugada Productions. Incluso tuvimos estreno en un cine con una chica vintage vendiendo helados desde una bandeja colgada del cuello, como en los viejos tiempos.